En 2013, el Gobierno de México lanzó un paquete de medidas para impulsar la iniciativa privada en el sector de los hidrocarburos. Como parte de ese programa, en el Golfo de México acaba de ser descubierto un importante yacimiento de petróleo. Se calcula que las nuevas reservas podrían estar entre 1.400 y 2.000 millones de barriles, es decir, entre 17 y 25% de las actuales reservas de ese país.
Para tener una idea de la orden de magnitud de las reservas del nuevo yacimiento. La energía que aportará el yacimiento es equivalen a más del 50% del total mundial de la energía renovable que fue generada en 2016 (excluyendo hidroelectricidad).
Sin embargo, el plan para impulsar la producción de petróleo de ese país se contradice con sus compromisos climáticos adquiridos en la COP-21 de Paris. México se comprometió a reducir al 2030 sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 22% y las emisiones de carbono negro en un 51%.