Al considerar el costo del suministro intermitente de las tecnologías renovables, la hidroelectricidad resulta ser la alternativa más eficiente. Recién en los escenarios más desfavorable de inversión en centrales hidroeléctricas, las tecnologías renovables variables: eólica y solar fotovoltaica, empiezan a ser competitivas.
Por Cristián Marcelo Muñoz
Las diferentes tecnologías de generación de electricidad se suelen comparar utilizando los costos nivelados de electricidad (LCOE), los que resumen los costos fijos y variables en una única métrica de costos, por unidad de energía generada. El LCOE refleja el precio que una tecnología requiere para cubrir todos sus costos de inversión y operación, sin embargo, no da cuenta del costo del suministro que tendrán que asumir los clientes finales. En efecto, la principal crítica al LCOE es que no considera los costos derivados de un perfil de generación irregular y no gestionable, asunto de particular relevancia en las centrales eólicas y solares fotovoltaicas, y por ende no representa el costo total en que incurre el sistema.
En el reciente estudio publicado por BdE, se revisa el estado del arte en las mejoras al LCOE, entre ellas, el costo nivelado total de generación de un sistema eléctrico (LFSCOE por sus siglas en ingles). Los LFSCOE se definen como los costos nivelados de proporcionar electricidad mediante una tecnología de generación determinada, asumiendo que un mercado específico debe abastecerse únicamente con esa fuente de electricidad, más los sistemas de almacenamiento que se requieran para suministrar en cada momento la totalidad de la demanda. Metodológicamente, el LFSCOE es el extremo opuesto al LCOE; mientras que este último asume implícitamente que la fuente respectiva no tiene la obligación de balancear el mercado ni satisfacer la demanda (y, por lo tanto, se pueden ignorar los patrones de demanda y de intermitencia), el LFSCOE asume que esta fuente tiene obligaciones máximas de equilibrio y suministro. El LFSCOE no se puede interpretar como el costo nivelado del sistema de abastecer la demanda considerando su composición tecnológica actual, que incluye centrales de base e intermitentes; sin embargo, su virtud radica en que permite comparar, de un modo sencillo, la competitividad entre las tecnologías existentes.
Para el sistema eléctrico chileno, los resultados muestran que el LFSCOE de la tecnología hidroeléctrica, dependiendo de su nivel de inversión, está en el rango de 78–146 USD/MWh, para la eólica es de 145 USD/MWh y de 140 USD/MWh en el caso de la tecnología solar fotovoltaica. Según muestran los resultados, solo en los escenarios más desfavorable de inversión en centrales hidroeléctricas, las tecnologías renovables variables: eólica y solar fotovoltaica, empiezan a ser competitivas.
Cristián Marcelo Muñoz
Director de BdE. También es profesor de Economía de la Energía y Medio Ambiente en el Departamento de Ingeniería Eléctrica y Profesor Regular en la Escuela Iberoamericana de Regulación Eléctrica, en la P. Universidad Católica de Chile.
Email de contacto cmmunozm@brevesdeenergia.com.
© Breves de Energía. Las opiniones son de exclusiva responsabilidad del autor y no comprometen de manera alguna a terceros. Todos nuestros desarrollos son originales, y están protegidos por la ley chilena de propiedad intelectual.