Tasas de descuento, cargos por capacidad, retrasos en transmisión y Shell comercializará baterías

Días atrás se anunció que Shell ofrecerá soluciones energéticas residenciales basadas en baterías y celdas solares. Con este motivo, la empresa adquirirá a la germana Sonnen experta en el almacenamiento de energía solar en el hogar y con presencia en Europa, los Estados Unidos y Australia. Shell intenta ampliar su influencia en la industria de la energía limpia, lo que probablemente la lleve a rivalizar con Tesla.

Las tasas de descuento de las empresas distribuidoras se revisan a la baja. España recortará la tasa de descuento de las distribuidoras eléctricas de 6,50% a 5,58% para el período 2020-2025. Contra esta propuesta hecha en noviembre ha arremetido Endesa la semana pasada. Alemania y los Estados Unidos también han bajado las tasas de descuento permitidas a las empresas transmisoras y distribuidoras.

Por otro lado, la misma Endesa e Iberdrola están solicitando que las plantas a gas reciban incentivos adicionales a través de pagos por capacidad, a cambio de estar disponibles. De este modo, las centrales a gas podrían apoyar la incorporación de las centrales renovables que ingresarán de forma masiva al sistema en los próximos años.

El gobierno español está discutiendo el Plan de Energía y Clima, que debe guiar el calendario del cierre de centrales nucleares y a carbón entre 2025 y 2030 y la reducción de emisiones. Una transición energética que ha generado problemas entre las empresas y el gobierno. Sucede, que la incorporación de nuevas plantas de energía renovable requiere más costos en la instalación de líneas, una inversión que el estado está tomando con precaución debido a los costos que implicaría al consumidor final.

El reporte anual  de British Petroleum (BP) predice que las energías renovables serán la principal fuente de energía del mundo en las próximas dos décadas. Por su parte, el gas natural es el único combustible fósil que aumenta su participación como energía primaria.

Este informe es poco auspicioso sobre las posibilidades de evitar niveles peligrosos de concentración de CO₂ en la atmósfera. BP pronostica que las emisiones de carbono crezcan un 10% para 2040, ya que considera que la demanda mundial de energía crece en un tercio y los combustibles fósiles tienen un papel clave.

A través de la captura de CO₂ desde la atmósfera, la empresa suiza Climeworks, cree que puede ayudar a detener el cambio climático.

La empresa instaló en la azotea de una planta de incineración de desechos en Hinwill, cerca de Zürich, el primer proceso de captura directa de CO₂ en la historia, y que busca vender el CO₂ capturado. Los dispositivos capturan el CO₂ del aire que luego es conducido a tanques que son transportados a una planta de bebidas gaseosas en donde el CO₂ es reutilizado, o bien, bombeado por tuberías a invernaderos.

Pero Climeworks no está obteniendo ganancias. Le cuesta entre U$500 y U$600 capturar una tonelada métrica de CO₂ desde el aire, pese a haber atraído alrededor de U$50 millones en inversiones y subvenciones privadas. El CO₂ capturado normalmente es secuestrado a gran profundidad, sin embargo, estos procesos no han sido del todo exitosos o han resultado demasiado caros, como lo es el caso de Climeworks.