En lo que podría constituir un cambio a sus metas de energía limpia, el gobierno de Australia formularía una propuesta que promocionaría la generación desde centrales termoeléctricas.
Asimismo, el país estaría abandonando los subsidios a las energías renovables, los certificados y los impuestos.
Puesto en contexto, desde 2007 las cuentas de electricidad han aumentado 63%, y en marzo de este año el sur de Australia sufrió apagones causados por la generación intermitente desde centrales eólicas y solares fotovoltaicas (FV) y la falta de suficiente generación termoeléctrica de respaldo. A raíz de esta crisis, se propuso que las centrales eólicas y solares garanticen su generación contratando respaldos térmicos o baterías.
Cabe recordar que Australia se comprometió en Paris a reducir sus emisiones al 2030 entre un 26-28% respecto de sus niveles de 2005.