El proyecto de ley de transmisión eléctrica, que actualmente se discute en el Congreso, cambia la asignación de los pagos de peajes. Actualmente los generadores pagan el 80% del costo de las líneas. Con el cambio de ley estos pagos se les traspasan a los consumidores − alrededor de US$33 millones anuales. Diario Financiero.
En una Breve reciente mostramos que el cambio de la regla de asignación favorecerá a los generadores alejados de los centros de consumo (BdE). Estimamos que la transferencia desde consumidores a los dueños de las centrales hidroeléctricas en el Sur que usan el sistema troncal podría llegar a USD 40 millones anuales.
La finalidad del cambio de ley es que las líneas se construyan con anticipación y holguras para que las decisiones de inversión y localización de centrales se independicen de las inversiones de transmisión. En otras palabras, se trata de que cada vez que una central evalúe instalarse, la transmisión necesaria ya esté construida y pagada. El costo lo pagarán los consumidores de electricidad mediante cargos de estampilla. Muchos creen que los consumidores se beneficiarán con capacidad ociosa permanente porque, sigue el argumento, se desatarán las inversiones en ERNC, se intensificará la competencia y los precios caerán (BdE).